Para evitarlo, hay que reponer constantemente las reservas de hidratación. Sin embargo, una ingesta excesiva de agua también puede tener graves consecuencias, ya que no sólo se pierde líquido, sino también sodio a través del sudor.
Si el contenido de este elemento en el suero sanguíneo desciende por debajo de 135 miligramos por decilitro, se produce hiponatremia. Los síntomas son hinchazón de brazos y piernas, calambres musculares, fatiga, dolor de cabeza, desorientación y confusión. Si no se reponen las reservas de sodio, la enfermedad puede provocar inflamación de los pulmones, el cerebro y coma.
Elija el momento adecuado del día
Cuando haga calor, evite hacer ejercicio en las horas centrales del día, cuando las temperaturas son máximas. Es mejor hacer ejercicio antes del mediodía y por la tarde, después de las 16.00 o 17.00 horas.